La Vida es un Videojuego La Vida es un Videojuego

Hay muchas preguntas en torno a la inteligencia artificial en los videojuegos. Una tecnología que causa miedo y plantea soluciones al mismo tiempo, que puede ayudar, pero también perjudicar a muchos, que propone cosas nuevas y puede afectar las que tradicionalmente amamos. Todo es una gran incógnita ahorita, así que invitamos a un par de desarrolladores para que nos ayuden a resolver este misterio y entender qué está pasando con la IA actualmente en la industria de videojuegos.

Ocho meses pasaron desde la última vez que estuvimos por aquí. Así que antes de empezar una nueva temporada de charlas y debates, es bueno hacer un contexto de lo que ha sucedido en la industria de videojuegos y entender cuáles son los temas más importantes de la actualidad. ¡Sean bienvenidos a los podcasts de La Vida es un Videojuego! 😊🎮

Hablamos con Julián Cordero, el creador de Despelote, un juego ecuatoriano que cuenta la historias que se desarrollan a través de jugar fútbol en la calle con amigos. Algo que muchos vivimos y de cierta forma queremos recordar.

Este es un personaje hecho para que el jugador le dé una parte de él, pero también para que reciba algo y se deje llevar por la aventura de conocer su mundo. Así que les dejamos toda la data que hay sobre este gran misterio…

Peaches. Peaches. Peaches, Peaches, Peaches... Mario da el salto a la pantalla gigante con una producción muy interesante, que ha divido a la crítica, pero que es lo que muchos soñamos ver. Así que hacemos nuestra reseña sobre esta experiencia y las mil referencias que encontramos en ella al personaje más importante de los videojuegos.

😉 Nota: los primeros 15 minutos del podcast no tienen spoilers.

Todos hablan de realismo como el siguiente gran paso de los videojuegos. Pero, realmente cuál es el aporte, en qué beneficia a esta industria alcanzar ese nivel técnico. No solo hablamos del realismo a nivel gráfico, sino en otros elementos donde la interacción es la clave de este entrenamiento. 😎

🙃 Posdata: perdón por decir tantas veces la palabra ‘real’.