52 min

Magia y Trabajo Social | La Academia de Trabajo Social 5×80 La Academia de Trabajo Social

    • Profesiones

María Riega Compadre es madre de dos hijos, trabajadora social y emprendedora. Ser madre le ha enseñado sobre la crianza y ese aprendizaje, sumado a la formación, le ha dado las herramientas necesarias para acompañar a las familias.

Ella misma se define como una "filapuntas", es decir, al igual que se saca punta a los lápices para que pinten de la mejor manera; ella lo hace con las personas, para que estas puedan sacar lo mejor que tienen.

Su labor es acompañar a las personas en estos procesos de cambio.

Actualmente, trabaja como mediadora familiar y hace intervenciones con la familia, la familia es el eje fundamental de nuestra sociedad, afirma María, y debe tenerse en cuenta en todas las esferas políticas.

Su periplo por el mundo del emprendimiento no es algo nuevo, ya comenzó en 1997 cuando a penas se conocía que el Trabajo Social se podía ejercer con la figura de ser autónoma. Por aquellas, le pidieron crear un proyecto relacionado con el ámbito de la adopción.

De esta experiencia aprendió muchísimo, ella se lo hacía todo, pero si algo se le quedó grabado, fue la importancia de delegar.

Para ella, el emprendimiento en Trabajo Social es la oportunidad de buscar diferentes sociales a los distintos problemas de la sociedad.

Tras esta experiencia laboral, pasó a crear una asociación. De aquella época recuerda cómo se esforzaban para encontrar familias a esos chicos y chicas (e incluso a veces varios hermanos) con "grandes expedientes" sociales.

Lo sorprendente de esta entrevista es cómo la magia llegó a las manos de María, con un titular de periódico que decía: "un chico huérfano es maltratado por sus tíos". Y sí, era la historia de Harry Potter.

En la entrevista, la compañera explica cómo empezó a utilizar la magia en sus intervenciones, primero con su hija y luego con el resto de personas con las que trabajaba.

María Riega Compadre es madre de dos hijos, trabajadora social y emprendedora. Ser madre le ha enseñado sobre la crianza y ese aprendizaje, sumado a la formación, le ha dado las herramientas necesarias para acompañar a las familias.

Ella misma se define como una "filapuntas", es decir, al igual que se saca punta a los lápices para que pinten de la mejor manera; ella lo hace con las personas, para que estas puedan sacar lo mejor que tienen.

Su labor es acompañar a las personas en estos procesos de cambio.

Actualmente, trabaja como mediadora familiar y hace intervenciones con la familia, la familia es el eje fundamental de nuestra sociedad, afirma María, y debe tenerse en cuenta en todas las esferas políticas.

Su periplo por el mundo del emprendimiento no es algo nuevo, ya comenzó en 1997 cuando a penas se conocía que el Trabajo Social se podía ejercer con la figura de ser autónoma. Por aquellas, le pidieron crear un proyecto relacionado con el ámbito de la adopción.

De esta experiencia aprendió muchísimo, ella se lo hacía todo, pero si algo se le quedó grabado, fue la importancia de delegar.

Para ella, el emprendimiento en Trabajo Social es la oportunidad de buscar diferentes sociales a los distintos problemas de la sociedad.

Tras esta experiencia laboral, pasó a crear una asociación. De aquella época recuerda cómo se esforzaban para encontrar familias a esos chicos y chicas (e incluso a veces varios hermanos) con "grandes expedientes" sociales.

Lo sorprendente de esta entrevista es cómo la magia llegó a las manos de María, con un titular de periódico que decía: "un chico huérfano es maltratado por sus tíos". Y sí, era la historia de Harry Potter.

En la entrevista, la compañera explica cómo empezó a utilizar la magia en sus intervenciones, primero con su hija y luego con el resto de personas con las que trabajaba.

52 min