Hablando de Corridito Isabel Lascurain y Gloria Calzada

¿Necesitas lentes? Quizá. Lo cierto es que a veces no sabemos si tenemos vista cansada, miopía, astigmatismo o alguna otra condición que afecte nuestra visión, pero hay una gran verdad: la edad avanzada suele manifestar problemas de este tipo antes que muchos otros achaques. Así que abre bien los ojos (y los oídos) para escuchar todo lo que tenemos que decir antes de sugerirte que te gradúes la vista y te hagas unos bonitos lentes a la medida.

Este episodio salió más subido de tono, pero era muy necesario para despejar de una vez por todas ese mito que afirma que la vida sexual termina a cierta edad. Te relatamos alegres anécdotas de viejitos que le siguen dando al cuerpo alegría, de relaciones íntimos que se resisten al paso de los años y de cómo debes mantener viva la libido a medida que tu cuerpo y tus expectativas cambian. ¡Duro contra el muro!

Hey, no todo en la vida son risas y diversión: a veces es inevitable sentirse triste, o experimentar la nostalgia por tiempos, cosas y personas que no volveremos a sentir a nuestro lado. Pero hay formas de lidiar con ambas emociones, que tienden a volverse más frecuentes a medida que envejecemos. Así que acompáñanos a echar una que otra lágrima, a reflexionar sobre lo que nos falta en la vida y a sentirnos más plenos… aún en nuestros momentos más tristones.

¡Y a darle con lo mismo! Sí, necear es prácticamente un deporte para algunas personas. El problema es que la edad acentúa esta condición. Aprende a reconocer qué tan necio es tu comportamiento para que no seas esa "persona de edad" insoportable en tus años dorados…

Si algo acumulamos con la edad es todo un compendio de sabiduría popular en forma de dichos, refranes, aforismos, ocurrencias o expresiones singulares que reflejan nuestra crianza, nuestro roce social (o falta del mismo) y hasta nuestro humor a nivel general. Así que decidimos explorar este "lenguaje de refuerzo" con expresiones que ilustran, instruyen, sonrojan o hacen reír. Pero ojo, no nos hacemos responsables si terminas diciéndolas por tu lado. Y es que dicen por ahí: "el que con lobos anda, a aullar se enseña".

Los conocemos. Los queremos. Nos reímos (con ellos, no de ellos). Pero lo cierto es que los hipocondriacos tienen que buscar la mejor forma de reconocerse como tales y de intentar superar esta condición. Escucha las anécdotas que tenemos (de gente MUY cercana) respecto a males imaginados, enfermedades mortales que sólo existen en la imaginación y las señales de que estás cayendo en el mundo de la hipocondria. ¡A escuchar!