El Espejo de la Luna El Espejo de la Luna

El 2022 fue el año más loco de mi vida. Me pasaron muchísimas cosas y si me siento a contártelo, no te lo creerías. Hoy te cuento, lo más resumido posible, las enseñanzas más importantes, esas que cambiaron mi vida.

Hemos llegado al punto de nuestra vida donde pensamos que no somos dignos de nada. De una razón para vivir, de una persona que nos quiera, de unos amigos que nos acompañen, o de una vida que amemos. Y por más que nos digan lo contrario, nos aferramos a esa idea. Desconocido, hoy te cuento algo: Eres digno de todo el amor del mundo.

Es momento de terminar con las ideas que vinculan el éxito a despertarse super temprano y a las rutinas mañaneras y empezar a relacionar el cambiar el mundo con un día bien planeado, la salud mental y un estilo de vida saludable más allá de leer, meditar y hacer afirmaciones. El cambio es mucho más que eso. No dejemos que quede opacado porque no descansamos lo suficiente y hacemos cosas porque vemos que a los demás les funcionaron.

Me pasé un tiempo sin redes sociales y me puse a analizar porque la gente opta por eliminarlos completamente de sus vidas. Pero, ¿es buena idea? ¿Cómo se siente salir de aquello de lo que parece que nuestra vida depende? Pero más importante, ¿de verdad podemos deshacernos de las redes sociales sin ninguna consecuencia?

Muchas personas después de sufrir quieren dedicar su vida a la venganza, pero a veces esa no es la mejor opción. Para ser egoístas en el buen sentido y cuidar de nosotros mismos, sin importar que pase con aquello que nos hizo daño. Tenemos que renacer de las cenizas, recuperarnos y dejar atrás, siendo las mejores personas y "dar con aguante blanco". 

Nota: Por supuesto el perdonar y dejar ir así como así no es posible en todos los casos, especialmente en aquellos que requieren justicia social.

A veces nos sentimos culpables de las cosas que nos pasaron, nos sentimos responsable y nos castigamos porque pensamos que nosotros mismos fuimos quienes nos hicimos daño. Aunque a veces no es así nos cuesta mucho trabajo perdonarnos y seguir adelante. Incluso llegamos a pensar que es imposible. Pero no lo es, todo pasa, incluso la culpa.