1,149本のエピソード

Reflexiones diarias de las lecturas por parte del presbítero Juan Diego Ruiz Arango.
Todos los días subimos la palabra de Dios y su reflexión.

Reflexiones diarias Padre Juan Diego Ruiz Arango. Medellín. Colombia‪.‬ Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    • 宗教/スピリチュアル

Reflexiones diarias de las lecturas por parte del presbítero Juan Diego Ruiz Arango.
Todos los días subimos la palabra de Dios y su reflexión.

    Reflexión jueves 6 de junio de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Reflexión jueves 6 de junio de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Hb 10,12-23

    Tenemos un gran sacerdote al frente de la casa de Dios

    Lectura de la carta a los Hebreos

    HERMANOS:
    Cristo ofreció por los pecadores, para siempre jamás, un solo sacrificio; está sentado a la derecha de Dios y espera el tiempo que falta hasta que sus enemigos sean puestos como estrado de sus pies.
    Con una sola ofrenda ha perfeccionado para siempre a los que van siendo consagrados.
    Esto nos lo atestigua también el Espíritu Santo. En efecto, después de decir: «Así será la alianza que haré con ellos después de aquellos días – dice el Señor-: Pondré mis leyes en sus corazones y las escribiré en su mente». añade: «Y no me acordaré ya de sus pecados ni de sus crímenes». Donde hay perdón, no hay ofrenda por los pecados.
    Hermanos, teniendo entrada libre al santuario, en virtud de la sangre de Jesús, contando con el camino nuevo y vivo que él ha inaugurado para nosotros a través de la cortina, o sea, de su carne, y teniendo un gran sacerdote al frente de la casa de Dios, acerquémonos con corazón sincero y llenos de fe, con el corazón purificado de mala conciencia y con el cuerpo lavado en agua pura.
    Mantengámonos firmes en la esperanza que profesamos, porque es fiel quien hizo la promesa.

    Palabra de Dios.

    Salmo
    Sal 40(39),6.7.8-9.10.11 (R. 8a.9a)

    R. Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.

    V. Cuántas maravillas has hecho,
    Señor, Dios mío,
    cuántos planes en favor nuestro;
    nadie se te puede comparar.
    Intento proclamarlas, decirlas,
    pero superan todo número. R.

    V. Tú no quieres sacrificios ni ofrendas,
    y, en cambio, me abriste el oído;
    no pides sacrificio expiatorio. R.

    V. Entonces yo digo: «Aquí estoy
    -como está escrito en mi libro-
    para hacer tu voluntad».
    Dios mío, lo quiero,
    y llevo tu ley en las entrañas. R.

    V. He proclamado tu salvación
    ante la gran asamblea;
    no he cerrado los labios;
    Señor, tú lo sabes. R.

    V. No me he guardado en el pecho tu defensa,
    he contado tu fidelidad y tu salvación,
    no he negado tu misericordia y tu lealtad
    ante la gran asamblea. R.
    Aclamación
    R. Aleluya, aleluya, aleluya.
    V. Mirad a mi siervo, a quien sostengo; mi elegido, a quien prefiero. Sobre él he puesto mi espíritu, para que traiga el derecho a las naciones. R.
    Evangelio
    Lc 22,14-20

    Esto es mi cuerpo. Esta copa es la nueva alianza, sellada con mi sangre

    Lectura del santo Evangelio según san Lucas

    Llegada la hora, se sentó Jesús con sus discípulos y les dijo:
    -«He deseado enormemente comer esta comida pascual con vosotros, antes de padecer, porque os digo que ya no la volveré a comer, hasta que se cumpla en el reino de Dios».
    Y, tomando una copa, pronunció la acción de gracias y dijo:
    -«Tomad esto, repartidlo entre vosotros; porque os digo que no beberé desde ahora del fruto de la vid, hasta que venga el reino de Dios».
    Y, tomando pan, pronunció la acción de gracias, lo partió y se lo dio, diciendo:
    -«Esto es mi cuerpo, que se entrega por vosotros; haced esto en memoria mía».
    Después de cenar, hizo lo mismo con la copa, diciendo:
    -«Esta copa es la nueva alianza, sellada con mi sangre, que se derrama por vosotros».

    Palabra del Señor.

    • 8分
    Reflexión miércoles 5 de junio de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Reflexión miércoles 5 de junio de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Primera lectura
    2Tm 1, 1-3.6-12

    Reaviva el don de Dios que hay en ti por la imposición de mis manos

    Comienzo de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo.

    PABLO, apóstol de Cristo Jesús por voluntad de Dios para anunciar la promesa de vida que hay en Cristo Jesús, a Timoteo, hijo querido: gracia, misericordia y paz de parte de Dios Padre y de Cristo Jesús, Señor nuestro.
    Doy gracias a Dios, a quien sirvo, como mis antepasados, con conciencia limpia, porque te tengo siempre presente en mis oraciones noche y día.
    Por esta razón te recuerdo que reavives el don de Dios que hay en ti por la imposición de mis manos, pues Dios no nos ha dado un espíritu de cobardía, sino de fortaleza, de amor y templanza.
    Así, no te avergüences del testimonio de nuestro Señor ni de mí, su prisionero; antes bien, toma parte en los padecimientos por el Evangelio, según la fuerza de Dios.
    Él nos salvó y nos llamó con una vocación santa, no por nuestras obras, sino según su designio y según la gracia que nos dio en Cristo Jesús desde antes de los siglos, la cual se ha manifestado ahora por la aparición de nuestro Salvador, Cristo Jesús, que destruyó la muerte e hizo brillar la vida y la inmortalidad por medio del Evangelio.
    De este Evangelio fui constituido heraldo, apóstol y maestro.
    Esta es la razón por la que padezco tales cosas, pero no me avergüenzo, porque sé de quien me he fiado, y estoy firmemente persuadido de quien tiene poder para velar por mi depósito hasta aquel día.

    Palabra de Dios.
    Salmo
    Sal 123(122),1-2a. 2bcd (R. 1a)

    R. A ti, Señor, levanto mis ojos.

    V. A ti levanto mis ojos,
    a ti que habitas en el cielo.
    Como están los ojos de los esclavos
    fijos en las manos de sus señores. R.

    V. Como están los ojos de la esclava
    fijo en las manos de su señora,
    así están nuestros ojos
    en el Señor, Dios nuestro,
    esperando su misericordia. R.
    Aclamación
    R. Aleluya, aleluya, aleluya
    V. Yo soy la resurrección y la vida -dice el Señor-; el que cree en mí no morirá para siempre. R.
    Evangelio
    Mc 12,18-27.

    No es Dios de muertos, sino de vivos

    Lectura del santo Evangelio según san Marcos.

    EN aquel tiempo, se acercan a Jesús unos saduceos, los cuales dicen que no hay resurrección, y le preguntan:
    «Maestro, Moisés nos dejó escrito: "Si a uno se le muere su hermano, dejando mujer pero no hijos, que se case con la viuda y dé descendencia a su hermano".
    Pues bien, había siete hermanos: el primero se casó y murió sin hijos; el segundo se casó con la viuda y murió también sin hijos; lo mismo que el tercer; y ninguno de los siete dejo hijos. Por último murió la mujer.
    Cuando llegue la resurrección y resuciten, ¿de cuál de ellos será mujer? Porque los siete han estado casados con ella».
    Jesús le respondió:
    «¿No están equivocados, por no entender la Escritura ni el poder de Dios? Pues cuando resuciten, ni los hombres se casarán ni a las mujeres serán dadas en matrimonio, serán como ángeles del cielo.
    Y a propósito de que los muertos resucitan, ¿no han leído en el libro de Moisés, en el episodio de la zarza, lo que le dijo Dios: "Yo soy el Dios de Abrahán, el Dios de Isaac, el Dios de Jacob"? No es Dios de muertos, sino de vivos.
    Están muy equivocados».

    Palabra del Señor.

    • 7分
    Reflexión martes 4 de junio de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Reflexión martes 4 de junio de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Primera lectura
    2P 3,12-15a.

    Esperamos unos cielos nuevos y una tierra nueva.

    Lectura de la segunda carta del apóstol san Pedro.

    QUERIDOS hermanos:
    ¡Ustedes esperan y apresuran la llegada del Día de Dios! Ese día los cielos se disolverán incendiados y los elementos se derretirán abrasados.
    Pero nosotros, según su promesa, esperamos unos cielos nuevos y una tierra nueva en los que habite la justicia.
    Por eso, queridos míos, mientras esperan estos acontecimientos, procuren que Dios los encuentre en paz con él, intachables e irreprochables, y consideren que la paciencia de nuestro Señor es nuestra salvación.
    Así pues, queridos míos, ya que están prevenidos, estén en guardia para que no los arrastre el error de esa gente sin principios ni decaiga su firmeza. Por el contrario, crezcan en la gracia y en el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él la gloria ahora y hasta el día eterno. Amén.

    Palabra de Dios.
    Salmo
    Sal 90(89), 2.3-4.10.14 y 16 (R. 1)

    R. Señor, tú has sido nuestro refugio
    de generación en generación.

    V. Antes que naciesen los montes
    o fuera engendrado el orbe de la tierra,
    desde siempre y por siempre tú eres Dios. R.

    V. Tú reduces el hombre a polvo,
    diciendo: «Retornen, hijos de Adán».
    Mil años en tu presencia son un ayer que pasó;
    una vela nocturna. R.

    V. Aunque uno viva setenta años,
    y el más robusto hasta ochenta,
    la mayor parte son fatiga inútil,
    porque pasan a prisa y vuelan. R.

    V. Por la mañana sácianos de tu misericordia,
    y toda nuestra vida será alegría y júbilo.
    Que tus siervos vean tu acción
    y sus hijos tu gloria. R.
    Aclamación
    R. Aleluya, aleluya, aleluya.
    V. El Padre de nuestro Señor Jesucristo ilumine los ojos de nuestro corazón,
    para que comprensamos cuál es la esperanza a la que nos llama. R.
    Evangelio
    Mc 12,13-17

    Den al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios

    Lectura del santo Evangelio según san Marcos.

    EN aquel tiempo, enviaron a Jesús algunos de los fariseos y de los herodianos, para cazarlo con una pregunta.
    Se acercaron y le dijeron:
    «Maestro, sabemos que eres veraz y no te preocupa lo que digan; porque no te fijas en apariencias, sino que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad. ¿Es lícito pagar el impuesto al César o no? ¿Pagamos o no pagamos?».
    Adivinando su hipocresía, les replicó:
    «¿Por qué me tientan? Tráiganme un denario, que lo vea».
    Se lo trajeron. Y él les preguntó:
    «¿De quién es esta imagen y esta inscripción?».
    Le contestaron:
    «Del César».
    Jesús les replicó:
    «Den al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios».
    Y se quedaron admirados.

    Palabra del Señor.

    • 6分
    Reflexión lunes 3 de junio de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Reflexión lunes 3 de junio de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Primera lectura
    2P 1,1-7

    Se nos han concedido las preciosas promesas, para que, por medio de ellas, sean partícipes de la naturaleza divina.

    Lectura de la segunda carta del apóstol san Pedro.

    QUERIDOS hermanos:
    A ustedes gracia y paz abundantes por el conocimiento de Dios y de Jesús nuestro Señor.
    Pues su poder divino nos ha concedido todo lo que conduce a la vida y a la piedad, mediante el conocimiento del que nos ha llamado con su propia gloria y potencia, con las cuales se nos han concedido las preciosas y sublimes promesas, para que, por medio de ellas, sean partícipes de la naturaleza divina, escapando de la corrupción que reina en el mundo por la ambición; en vista de ello, pongan todo empeño en añadir a su fe la virtud, a la virtud el conocimiento, al conocimiento la templanza, a la templanza la paciencia, a la paciencia la piedad, a la piedad el cariño fraterno, y al cariño fraterno el amor.

    Palabra de Dios
    Salmo
    Sal 91(90),1-2.14-15ab. 15c-16 (R. 2b)

    R. Dios mío, confío en ti.

    V. Tú, que habitas al amparo del Altísimo,
    que vives a la sombra del Omnipotente,
    di al Señor: «Refugio mío, alcázar mío,
    Dios mío confío en ti». R.

    V. «Se puso junto a mí, lo libraré;
    lo protegeré porque conoce mi nombre;
    me invocará y lo escucharé.
    Con él estaré en la tribulación». R.

    V. «Lo defenderé, lo glorificaré,
    lo saciaré de largos días
    y le haré ver mi salvación». R.
    Aclamación
    R. Aleluya, aleluya, aleluya.
    V. Jesucristo, eres el testigo fiel, el primogénito de entre los muertos; nos amaste y nos has librado de nuestros pecados con tu sangre. R.
    Evangelio
    Mc 12,1-12.

    Agarrando al hijo amado, lo mataron y lo arrojaron fuera de la viña.

    Lectura del santo Evangelio según san Marcos.

    EN aquel tiempo, Jesús se puso a hablar en parábolas a los sumos sacerdotes, a los escribas y a los ancianos:
    «Un hombre plantó una viña, la rodeó con una cerca, cavó un lagar, construyó una torre, la arrendó a unos labradores y se marchó lejos. A su tiempo, envió un criado a los labradores, para percibir su tanto del fruto de la viña. Ellos lo agarraron, lo azotaron y lo despidieron con las manos vacías. Les envío de nuevo otro criado; a este lo descalabraron e insultaron. Envió a otro y lo mataron; y a otros muchos, a los que azotaron o los mataron,
    Le quedaba uno, su hijo amado. Y lo envió el último, pensando: ´´Respetarán a mi hijo¨.
    Pero los labradores se dijeron:
    ¨Este es el heredero. Venga, lo matamos y será nuestra la herencia¨.
    Y, agarrándolo, lo mataron y lo arrojaron fuera de la viña.
    ¿Qué hará el dueño de la viña? Vendrá, hará perecer a los labradores y arrendará la viña a otros.
    ¿No han leído aquel texto de la Escritura: ¨La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular. Es el Señor quien lo ha hecho, ha sido un milagro patente¨?».
    Intentaron echarle mano, porque comprendieron que había dicho la parábola por ellos; pero temieron a la gente y, dejándolo allí, se marcharon.

    Palabra del Señor.

    • 7分
    Reflexión Domingo 2 de junio de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Reflexión Domingo 2 de junio de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Primera lectura
    Éx 24,3-8

    Esta es la sangre de la alianza que el Señor ha concertado con ustedes

    Lectura del libro del Éxodo.

    EN aquellos días, Moisés bajó y contó al pueblo todas las palabras del Señor y todos sus decretos; y el pueblo contestó con voz unánime:
    «Cumpliremos todas las palabras que ha dicho el Señor».
    Moisés escribió todas las palabras del Señor. Se levantó temprano y edificó un altar en la falda del monte, y doce estrellas, por las doce tribus de Israel. Y mandó a algunos jóvenes de los hijos de Israel ofrecer al Señor holocaustos e inmolar novillos como sacrificios de comunión. Tomó Moisés la mitad de la sangre y la puso en vasijas, y la otra mitad la derramó sobre el altar. Después tomó el documento de la alianza y se lo leyó en voz alta al pueblo, el cual respondió:
    «Haremos todo lo que ha dicho el Señor y le obedeceremos».
    Entonces Moisés tomó la sangra y roció al pueblo, diciendo:
    «Esta es la sangre de la alianza que el Señor ha concertado con ustedes, de acuerdo con todas estas palabras».

    Palabra de Dios.

    Salmo
    Sal 116(115),12-13.15-16. 17-18 (R. 13)

    R. Alzaré la copa de la salvación, invocando el nombre del Señor.

    O bien:

    R. Aleluya.

    V. ¿Cómo pagaré al Señor
    todo el bien que me ha hecho?
    Alzaré la copa de la salvación,
    invocando el nombre del Señor. R.

    V. Mucho le cuesta al Señor
    la muerte de los fieles.
    Señor, yo soy tu siervo,
    hijo de tu esclava:
    rompiste mis cadenas. R.

    V. Te ofreceré un sacrificio de alabanza,
    invocando el nombre del Señor.
    Cumpliré al Señor mis votos
    en presencia de todo el pueblo. R.

    Segunda lectura
    Hb 9,11-15

    La sangre de Cristo podrá purificar nuestra conciencia

    HERMANOS: Cristo ha venido como sumo sacerdote de los bienes definitivos. Su «tienda» es más grande y más perfecta: no hecha por manos de hombre, es decir, no de este mundo creado.
    No lleva sangre de machos cabríos, ni de becerros, sino la suya propia; y así ha entrado en el santuario una vez para siempre, consiguiendo la liberación eterna.
    Si la sangre de machos cabríos y de toros, y la ceniza de una becerra, santifican con su aspersión a los profanos, devolviéndoles la pureza externa, ¡cuanto más la sangre d e Cristo, que, en virtud del Espíritu eterno, se ha ofrecido a Dios como sacrificio sin mancha, podrá purificar nuestra conciencia de las obras muertas, para que demos culto al Dios vivo!
    Por esta razón, es mediador de una alianza nueva: en ella ha habido una muerte que ha redimido de los pecados cometidos durante la primera alianza; y así los llamados pueden recibir la promesa de la herencia eterna.

    Palabra de Dios

    Evangelio
    Mc 14,12-16.22-26.

    Lectura del santo Evangelio según san Marcos.

    EL primer día de los Ácimos, cuando se sacrificaba el cordero pascual, le dijeron a Jesús sus discípulos
    «¿Dónde quieres que vayamos a prepararte la cena de Pascua?».
    Él envió a dos discípulos diciéndoles:
    «Vayan a la ciudad, les saldrá al paso un hombre que lleva un cántaro de agua; síganlo, y en la casa adonde entre, díganle al dueño: “El Maestro pregunta: ¿Cuál es la habitación donde voy a comer la Pascua con mis discípulos?”.
    Les enseñará una habitación grande en el piso de arriba, acondicionada y dispuesta. Prepárennosla allí».
    Los discípulos se marcharon, llegaron a la ciudad, encontraron lo que les había dicho y prepararon la Pascua.
    Mientras comían, tomó pan y, pronunciando la bendición, lo partió y se lo dio diciendo:
    «Tomen, esto es mi cuerpo».
    Después tomó el cáliz, pronunció la acción de gracias, se lo dio y todos bebieron.
    Y les dijo:
    «Esta es mi sangre de la alianza, que es derramada por muchos. En verdad les digo que no volveré a beber del fruto de la vid hasta el día que beba el vino nuevo en el reino de Dios».
    Después de cantar el himno, salieron para el monte de los Olivos.

    Palabra del Señor.

    • 7分
    Reflexión sábado 1º de junio de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Reflexión sábado 1º de junio de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Primera Lectura
    Lectura de la carta del apóstol san Judas (17.20b-25):

    Acordaos de lo que predijeron los apóstoles de nuestro Señor Jesucristo. Continuando el edifico de nuestra santa fe y orando movidos por el Espíritu Santo, manteneos en el amor de Dios, aguardando a que nuestro Señor Jesucristo, por su misericordia, os dé la vida eterna. ¿Titubean algunos? Tened compasión de ellos; a unos, salvadlos, arrancándolos del fuego; a otros, mostradles compasión, pero con cautela, aborreciendo hasta el vestido que esté manchado por la carne.
    Al único Dios, nuestro salvador, que puede preservaros de tropiezos y presentaros ante su gloria exultantes y sin mancha, gloria y majestad, dominio y poderío, por Jesucristo, nuestro Señor, desde siempre y ahora y por todos los siglos. Amén.

    Palabra de Dios

    Salmo
    Sal 62,2.3-4.5-6

    R/. Mi alma está sedienta de ti, Señor, Dios mío

    Oh Dios, tú eres mi Dios, por ti madrugo,
    mi alma está sedienta de ti;
    mi carne tiene ansia de ti,
    como tierra reseca, agostada, sin agua. R/.

    ¡Cómo te contemplaba en el santuario
    viendo tu fuerza y tu gloria!
    Tu gracia vale más que la vida,
    te alabarán mis labios. R/.

    Toda mi vida te bendeciré
    y alzaré las manos invocándote.
    Me saciaré como de enjundia y de manteca,
    y mis labios te alabarán jubilosos. R/.

    Evangelio
    Lectura del santo evangelio según san Marcos (11,27-33):

    En aquel tiempo, Jesús y los discípulos volvieron a Jerusalén y, mientras paseaba por el templo, se le acercaron los sumos sacerdotes, los escribas y los ancianos y le preguntaron: «¿Con qué autoridad haces esto? ¿Quién te ha dado semejante autoridad?»
    Jesús les respondió: «Os voy a hacer una pregunta y, si me contestáis, os diré con qué autoridad hago esto: El bautismo de Juan ¿era cosa de Dios o de los hombres? Contestadme.»
    Se pusieron a deliberar: «Si decimos que es de Dios, dirá: «¿Y por qué no le habéis creído?» Pero como digamos que es de los hombres…» (Temían a la gente, porque todo el mundo estaba convencido de que Juan era un profeta.)
    Y respondieron a Jesús: «No sabemos.»
    Jesús les replicó: «Pues tampoco yo os digo con qué autoridad hago esto.»

    Palabra del Señor.

    • 8分

宗教/スピリチュアルのトップPodcast

クラウドチャーチ牧仕の聖書の話
小林拓馬
Temple Morning Radio
松本紹圭
道端ドコカの迷い道 from 5点ラジオ
Michibata Dokoka
オカルト捜査官のFOIラジオ
FOIオカルト捜査官
Dr.Recella presents 江原啓之 おと語り
TOKYO FM
Talk with your soul 10分間瞑想
Talk with your soul