Pastor Roberto Pino ROBERTO PINO LEAL

El amor de Dios es incondicional porque Jesus no murió solo por los buenos y santos sino que fue a la cruz por los malos, los indiferentes, los rebeldes, los que son hostiles a Él. ¡Dios te ama tal y como estas! De echo cuando estuvo en esa cruz demostró este gran amor perdonando a quienes lo estaban matando. Jesus dijo en la cruz “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen” eso es Amor perfecto. (Lucas 23:34)

Los rompe techos son los que el Espíritu Santo usa para traer las almas a Jesus.
Son los que provocan los milagros al interior de la casa. No tienen el conocimiento de los religiosos, pero su pasión y valentía son suficientes para agradar a Dios. Mientras la multitud esta encerrada en las 4 paredes de la casa, ellos estan afuera viendo si alguien necesita a Jesus. Mientras los religiosos están sentados criticando la reunión, ellos están haciendo lo imposible para que alguna persona conozca el amor de Jesus. ¡Son los rompe techos! Los que no se conforman con la rutina, su pasión y valentía los hace sobresalir en cualquier iglesia.

Cada persona a recibido del Señor algo muy valioso. La parábola de los talentos nos enseña que no se trata de CUANTO recibimos, sino de QUE HACEMOS con lo que hemos recibido. Hay personas que estan llenas de habilidades y murieron en el anonimato y otras que recibieron tan solo una habilidad y han impactado el mundo. La pregunta es:
¿Que estas haciendo con lo que Dios te entregó? Ese talento, esa capacidad, esa habilidad, ese don, ese ministerio, ese llamado. ¿Que estas haciendo con él?
En esta parábola vemos claramente 3 barreras que impiden nuestro desarrollo personal y espiritual.

El fuego es el elemento sobrenatural que distingue un cristiano relevante de otro que pasa desapercibido.
Sin el fuego del Espiritu Santo en nuestras vidas solo estaríamos en una religión muerta que no produce nada.

La historia de esta mujer llamada Jael nos enseña que no necesitamos grandes recursos para hacer algo por el Señor. Dios ya nos equipo con todo lo necesario para que vivamos en victoria. En manos de Dios, lo que parece débil o insignificante puede ser utilizado de manera poderosa para cumplir sus propósitos.

Nuestro Dios no valora a las personas como lo hace el mundo, el mundo mira primero la apariencia, el poder o el talento, Dios mira el corazón.

En este 15 aniversario de Renuevo pienso en lo insignificantes que hemos sido y como a pesar de eso Dios nos amó y nos escogió como iglesia.

Dios le dijo a Israel:

No por ser vosotros más que todos los pueblos os ha querido Jehová y os ha escogido, pues vosotros erais el más insignificante de todos los pueblos; 8 sino por cuanto Jehová os amó… (Deuteronomio 7:7-8)