Una cerveza con Dios Santo en Casa

¿Esfuerzos humanos o gracia de Dios? Un poco de ambas. De hecho, un perfecto balance. En este episodio, te contamos un poco de como tenemos que tener siempre la mirada y los sueños puestos en el cielo, pero con los pies en la tierra y trabajando mucho.

¡Qué mal visto está el placer! Pareciera que para ser cristiano tuviéramos que renunciar a todo el placer existente. Tristemente olvidamos que el placer es creado por Dios. ¡Pero no! El placer fue creado por Él, para que nosotros disfrutemos. Lógicamente, el placer hay que ordenarlo mediante la templanza, y verlo siempre cono un medio, y nunca como un fin. En este episodio, tocamos un poco más a fondo este tema.

¡Cuántas veces hemos visto a Dios cómo un ladrón! Que nos quiere robar nuestras pertenencias o que quiere que renunciemos a lo que tenemos, ¡y no! ¡así no es Jesús! Dios es un Padre que te ama con locura, que te pide lo que sabe que, si entregas, te hará muy feliz, y te lo pide con mucha libertad, a tu tiempo. En este episodio tocamos este tema, y tratamos de dejarte muy en claro que: no, Dios no es un ladrón de muñecas.

¡Empezamos el mes de María! Y arrancamos contando muchas cosas de ella y de su amor, que es uno de los más grandes, más bellos, más puros y más hermosos que podemos experimentar. La Virgen es esa Madre que sabemos que va a estar ahí siempre para nosotros, y que está siempre atenta a nuestras necesidades y en como nos puede echar una mano. No hay mujer que nos ame más que ella, ni mujer que nos ame mejor que ella. ¡Aprovechemos al máximo este mes, para que nos enseñe a amar como ella ama!

“No te comas la cabeza”, una frase que se puede ver desde dos puntos de vista: desde el dejarse llevar por la corriente y despreocuparte de la vida, hasta el preocuparse en exceso e inventarse películas en la imaginación de lo que podría pasar. En este episodio hablamos de como estos dos extremos de la misma frase los tenemos que evitar a toda costa, y así poder encontrar un punto medio para conseguir la paz y la unidad.

Seguro todos nos hemos preguntado alguna vez si realmente somos dignos, dignos del amor de Dios, del amor de nuestra familia, de nuestro novio o novia, de nuestros amigos, en fin...de tantos regalos que Dios nos hace. La respuesta es sí. Si eres digno, y nunca vas a dejar de ser digno. En este episodio, con nuestra gran invitada Cynthia Canales, fundadora de la asociación civil "serprovida", te explicamos un poco el por qué de esa dignidad tan grande que todos tenemos.