Ser Creciente Maria Camila Florian Buendia

El cuerpo humano es uno de los sistemas más complejos y fascinantes que la existencia misma experimenta, el sistema nervioso compuesto por vías , circuitos eternos que transporta información a nivel electroquímico de la forma más inexplicable  a velocidades inimaginables.

 Este es el sistema que nos brinda la posibilidad de conectar nuestro mundo interno con las exquisiteces del mundo externo, es el mismo que en su primer momento es diseñado mágicamente dentro del útero de mamá. Como mamíferos nuestras hormonas permiten la reconstrucción del cerebro materno frente al andamiaje perfecto del embrión en gestación. 

 Las hormonas las observamos como nuestra luz verde para vivenciar una de las etapas más sobrenaturales que existen y entender  que a partir de su funcionamiento podremos utilizarlas a nuestro favor para desarrollar un vínculo fortalecido con nuestro bebe.



Las fuentes donde pueden profundizar un poco mas: 


Moratalla, N. L. (2009). Comunicación materno-filial en el embarazo. Cuadernos de Bioética, 20(3), 303-315.
Masera, R. G., Martín, P. A., & Pavón, I. R. (2011). Relación materno fetal y establecimiento del apego durante la etapa de gestación. International Journal of Developmental and Educational Psychology, 1(1), 425-434.

La inteligencia emocional regula los motivos, el deseo de la vida, los valores, la proactividad, etc. Se sustenta que un bebé necesita padres o figuras primarias vinculados emocionalmente fortalecidos para así poder contribuir a una mejor conexión y potencializar de esta manera las habilidades cerebrales; Es un punto básico de la construcción de la inteligencia emocional y el impacto que ésta tendrá en la estructura y funcionalidad del cerebro de nuestro infante.