Vuelo 129 con Luis Enrique Luis Enrique del Rio

Hay momentos inesperados que provocarán cambios significativos en nuestras vidas. A mí me toco enfrentar uno de estos episodios el día 29 de enero del año 2000 (01-29) atravesando la Carretera PR129 en el kilómetro 12.9, ¿casualidad? Bueno, sólo con pensar en la misericordia de Dios encuentro que algo especial hay en todo lo acontecido, un gran plan se ha orquestado para un destino maravilloso pero mientras tanto sigo caminando. 

Te contaré un poco de mi historia, del inolvidable 01-29, confiando que este corto relato te inspire. No te detengas por lo que pasó ó está pasando, sólo ¡SIGUE CAMINANDO!   

Nos pasamos la vida lamentándonos por las cosas que tenemos y también por las que no tenemos. Deseamos alcanzar un sin fin de sueños para los cuales no hacemos nada en absoluto. Todo obstáculo se convierte en una excusa, una justificación y una pantalla para que las personas se apiaden de nosotros, es que no estamos dispuestos a pagar el precio por eso que decimos anhelar. 

Las personas que en realidad desean prosperar en la vida ven oportunidades en cada tropiezo, buscan ser mejores cada día, no sé lamentan de su pasado y eliminan toda cosa que venga a contaminar sus pensamientos. La vida plena y abundante consiste en tomar buenas decisiones y adoptar frases que nos abran paso hacia lo que nos corresponde por herencia divina.  

En ocasiones tenemos la oportunidad de ser parte de un plan divino para ayudar otros. Será necesario estar atentos a la voz de Dios, actuar en obediencia y mostrar la misericordia del Padre mediante nuestra disposición. Cuando obedecemos al llamado del ''Boss'' experimentamos una satisfacción tan grande que se convierte en gratitud.  

Hay cosas en nuestras vidas que estarán por un momento definido, pasado un tiempo quedarán atrás ya que cumplieron su propósito en nosotros. Nunca te aferres a un diente de leche por no enfrentar la separación y la perdida del mismo, es ley natural deja ir todo aquello que ya no aporta a tu vida y prepárate para las grandes cosas que se aproximan. ¡Disfruta del proceso! 

El relato de un sueño que nos advierte la crisis que el Mundo vive hoy. Las personas a diario experimentan el temor, no solamente por la pandemia que nos amenaza sino por la perdida de estabilidad, de seguridad y de aquellas cosas que poseen. Fomentar nuestra relación con Dios es vital en este tiempo porque hay una gran pandemia que ha venido a separar al hombre de su Creador, un virus que mora en nuestro interior que sólo el Amor Divino puede eliminar. La Salvación es lo más valioso que tenemos protégela y abrázala. 

A través de los años desarrollamos grandes habilidades y talentos, los mismos deben servir como canciones que llenan y alegran la vida de los que nos rodean. Debemos cada día auto examinarnos y actualizarnos de ser necesario para que seamos como un cántico nuevo en la mañana de nuestra gente. Afuera hay mucha necesidad y nosotros podemos llegar a ser de bendición para un alma dolida, confundida y en aprietos. Canta en todo tiempo con una sonrisa, con tus buenas obras y carisma. ¡Comparte tu Música Interior!