Extrañando a Melody MicaMinelli

[4:36 a. m., 29/5/2021] : Neurosis pandémica. La constancia no es algo que se pueda sostener en tiempos tan cambiantes. Yo cambio, el mundo, el contexto, las ideas. Todo lo que haga tiene que ver conmigo, de eso estoy segura. Buscar mi lugar, no quiere decir que sea uno o que sea siempre el mismo. Ejercitar la empatía, con les otres, con une misme.

[4:42 a. m., 29/5/2021] : Casi siempre el alivio viene en compartir con les demás, en escuchar a les otres. En sabernos comunidad y no individuos. En entender que nada nos pasa a nosotres soles, saber que ahí afuera hay gente que le está pasando lo mismo alivia, pone en perspectiva, humaniza. Capaz esa sea la salida. Hablar más de lo que nos pasa. No para "solucionar" sino aunque sea para intentar entendernos, abrazarnos y surfear la ola.

[4:46 a. m., 29/5/2021] : Esta nota va a ser muy a tono personal, pero eso no significa que sea única. Lo personal es político y lo político es social. Así que en cierta forma, más de índole cualitativa, es un pedazo de realidad, la mía que seguro es la de mucha gente más.

[4:56 a. m., 29/5/2021] : La pandemia me llenó de imágenes tétricas, apocalípticas: gente con tapabocas en la calle, niñes con pequeños barbijos, que me hace pensar "qué clase de humanidad somos". Las noches sin dormir en el sillón frío del San Juan de Dios mientras las enfermeras tocaban la puerta cada 10 minutos para controlar a mi mamá. La imagen del saturador a 70 y bajando, la desesperación de no sabe qué pasaba, googlear cuánto es la saturación normal, que nadie me explique, porque soy joven mi mamá también y esto no debería estar pasando. La terapia intensiva, el velorio y la culpa de haber abrazado, cuerpo a cuerpo a quienes venían a despedirse.  La pandemia me trajo noches de pesadillas, de levantarme llorando, de insomnio y angustia. Pero también me enseñó de lazos, esos qu…

[4:56 a. m., 29/5/2021] : La pandemia nos pasa, hablemos de esto también.

No entiendo si el tiempo pasa muy rápido o muy lento, es muy complejo identificar lo que siento. Claramente es un momento de crisis, quiebre, inflexión, cambios. Estoy inquieta, alerta, como si pudiera anticiparme a las malas noticias, en una constante preparación. Por momentos entro en una espiral, mi mente va más rápido que el tiempo, me pierdo del presente pensando en el futuro, me adelanto, por las dudas. Es la ansiedad.

Extraño a mi mamá. extraño a Dani, me extraño en mi inocencia. No sé quién voy a ser, tengo miedo de convertirme en una mala persona, en alguien egoísta. Siento que estoy haciendo todo mal, pero no hay una manera de hacer las cosas. No quiero lastimar a nadie, pero lo estoy haciendo.

Tengo buenos amigos, buena gente. Eso es una bendición. Debo ser buena persona, qué alivio.

A veces tengo miedo de arruinar todo, pero todo se arruina todo el tiempo, y no se trata de que las cosas salgan según el plan, sino de tener un plan, flexible, adaptable, a lo que la vida depare.

Es momento de cambio de planes, dar una volanteada, cambiar el rumbo, o mejor dicho, agarrar fuerte el timón y tratar de seguir, atravesar la tormenta, seguir, como sea y como se pueda, pero seguir.

El mundo me asusta, me cuesta ver sus bellezas, aunque estoy rodeada de ellas: la mañana, los gatitos, el mate con café del chuns, los abrazos, la ranchada, la ducha caliente, los proyectos, la familia, cantar, el amor. Lo nombro para mirarlo, porque en este momento me cuesta enfocarme en ellos. Todo me da miedo. Pero el miedo no pasa sin transitarlo.

Sí, es uno de los momentos más difíciles de mi vida, y del mundo. Y así es como se siente. El presente es todo lo que tenemos. Tengo que habitarlo más.

17-04-2021 / 20:56pm

La cordura es muy fina, muy frágil. No me entiendo, no sé cómo contenerme. No puedo cuidarme, bajé todas las barreras. Si no hay amor, estoy al horno.

11-04-2021 / 9:57 pm

Siento que retrocedí casilleros. Trato de buscar la moraleja, la lección que tengo que aprender. Pero tal vez no la haya. Es como si quisiera encontrar la receta que me lleve al éxito, a la superación, a la canalización de esta angustia en algo bueno y productivo. Mi experiencia es mi tesoro. ¿Qué estoy haciendo mal? ¿Cómo saberlo sin leer las instrucciones? Pero para estas cosas no las hay. El camino correcto es el que me haga sentir mejor, pero nada me hace sentir mejor.

El sentido es algo que aparece de vez en cuando, dura unos instantes y después se esfuma. Trato de entender cómo me siento, para saber dónde estoy parada. Intento crear una perspectiva diferente desde donde mirar las cosas, pero desconfío de mi criterio. Me perdí.

Mi vulnerabilidad es mi fortaleza, abrazame un rato. Mi sensibilidad es mi escudo, elijo cuidarme.

Siento como si el tiempo no hubiese pasado, como si no supiera por donde empezar. El entusiasmo dura lo que el efecto de la droga, y por más que lo vuelva a encender no trae ilusiones.

09-04-2021 / 18:01 pm

Lamento que tengas que pasar por todo esto. Si pudiera hacer algo para ahorrartelo o apaciguarlo lo haría. Pero así es la vida, cada uno tiene su experiencia y esta es la tuya. Oportuncrisis, hace que valga la pena el dolor. Aprende a vivir como te guste, la vida es tuya. Elegí con qué ojos querés mirarla. Elegí tu paleta de colores, la escenografía y los actores. Ponele el mejor soundtrack para cada momento. Es tu peli, el show debe continuar.

04-04-2021 / 7:18pm

Estoy en el ojo del huracán, en el medio de la tormenta. Pero estoy bien. Escucho las tensiones que surgen de mi interior, sé lo que tengo y no tengo que hacer. Me estoy encontrando con el dolor, y lo dejo acompañarme. No busco explicaciones, lo dejo ser. Lloro para dormir, duermo para soñar que sigo llorando. Está bien. La vida cambió. No reniego. Tengo lucidez, claridad. Me gustaría poder más, me gustaría poder evitarle el dolor a los demás. Pero no puedo. Ella va a estar bien.

Soñé que le decía que aceptara su propia muerte, también lo soñé con Dani en su momento. Será que me lo decía a mí misma, o que busco un canal de diálogo, un último diálogo. Tengo una tranquilidad extraña, sé que voy a estar bien. Sé que estoy bien, que tengo un rumbo, que conozco lo que me hace feliz, que entiendo mis convicciones, y que acepto críticas de las personas que respeto. Entiendo que puedo herir, y me responsabilizo de mi existencia y vínculo para con les demás. Tengo buenas amistades, las mejores del mundo. Tengo al mejor compañero. Una buena familia. Y la inteligencia emocional para procesar el dolor, para cuidarme y a les demás.

Mi único miedo es lastimar a alguien en mi proceso, volverme egoísta, encerrarme en mi dolor y no ver que el mundo sigue girando.

sábado, 3 de abril de 2021 / 08:15 am