Infantas y Reinas Infantas y Reinas

María de Padilla siguió la estela de Leonor de Guzmán y se convirtió en la amante de Pedro I de Castilla, mientras él estaba casado con Blanca de Borbón. Murió muy joven y el rey la legitimó después de muerta, dándole a las hijas que había tenido con ella el estatus real.

Entre ellas estaba Constanza, que con el tiempo se convertiría en la madre de Catalina de Lancaster, y por tanto, en bisabuela de Isabel la Católica. Maria es, pues, una de las tatarabuelas de la famosa reina de Castilla.

Hoy hablamos de ella.

En el cuadro de Goya titulado “La condesa de Chinchón” aparece una mujer joven con aire melancólico, mirando hacia su izquierda. Pero ¿quién es esta joven? Para empezar, en aquel momento ya tenía un título superior, el de princesa de la Paz, por ser la esposa de Manuel Godoy. Tuvo una vida bastante caótica y desgraciada y acabó sus días en París. Hoy hablamos de María Teresa de Borbón y Vallabriga, nieta de Felipe V y primera esposa de Godoy.

La princesa Luisa fue el primer miembro de la realeza británica en tener un matrimonio desigual desde el siglo XVI. Casó con un noble con el que no tuvo hijos, pero su vida contiene también un hijo secreto y varios supuestos amantes. Hoy la conocemos.

Catalina de la Cerda fue la esposa del poderoso Duque de Lerma, valido de Felipe III. Siempre a la sombra de su marido, éste la colocó como camarera mayor de la Reina. En el episodio de hoy os hablamos de su vida y de su peculiar entierro, entre otras cosas.

Hay una idea preconcebida de que las damas que vivían en el Alcázar lo hacían en un régimen casi monacal, pero el fenómeno del galanteo del que hablamos hoy echa por tierra algunos de esos mitos.

Os contamos qué era el galanteo, su origen y los numerosísimos problemas que generó a los distintos monarcas así como de qué manera los solucionaron.

Hoy hablamos de una mujer muy desconocida que fue reina consorte de España durante la Guerra de la Sucesión. Isabel Cristina de Brunswick fue la esposa de Carlos VI, pretendiente austríaco a la Corona de España tras la muerte de Carlos II. Él mismo se tituló rey de España, con el nombre de Carlos III, y por tanto Isabel se convirtió en reina al casarse con él. Mientras tanto, en Madrid coexistían con ellos otros dos reyes: Felipe V y María Luisa Gabriela de Saboya.

Se casaron en la ciudad de Barcelona y allí vivieron unos años sin tener hijos, aunque posteriormente fueron los padres de la famosa emperatriz María Teresa. Sin embargo, los acontecimientos históricos inesperados, tan comunes en la dinastía de los Habsburgo, cambiaron el destino de esta pareja.