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Descentralización Baradit Constituyente

    • Politics

La redistribución del poder que propone el Estado Regional es una cuenta pendiente desde 1829, cuando la aristocracia santiaguina tomó sangrientamente el poder, mataron a héroes de nuestra independencia y reinstalaron el orden colonial concentrado en Santiago con Portales a la cabeza. Desmontaron el ejército de Concepción y acumularon todo el poder para unas pocas familias santiaguinas. Idea de la que no hemos podido desprendernos. 

Hoy, estamos desmontando ese régimen portaliano, que no es más que entregarle el poder a unos pocos santiaguinos, hombres y blancos, usando al ejército como policía nacional para alcanzar una supuesta ESTABILIDAD política y económica a través de la sangre y el fuego cuando es necesario. 

Ha sido una lucha permanente de los trabajadores contra las fuerzas conservadoras que tienen el orden y los privilegios concentrados y secuestrados, que anuncian el apocalipsis frente a tal o cual cambio o derecho que favorece a la mayoría pero los desfavorece a ellos

A principios del s XX, un congresista chileno, santiaguino, en este mismo edificio, acusó que una ley que se tramitaba, iba a traer el descalabro a la economía de las provincias del sur, porque la disminución violenta de la mano de obra iba a colapsar la industria, que era una medida cruel que iba a disminuir los ingresos de las familias más pobres del campo. Esa ley era la prohibición del trabajo infantil en Chile. Otro grupo se negaba a una iniciativa del gobierno que traería desempleo, colapso en la economía agrícola del Maule y Colchagua y la pérdida de nuestras tradiciones. Esa iniciativa era traer una partida grande de tractores para eficientar la producción y reemplazar la tracción animal. Siempre el apocalipsis, que nunca llega

Hoy también consagramos que los derechos son inherentes a las personas. Pero discrepo. Porque INHERENTE significa ESENCIAL, es decir que son algo propio como el calor es inherente al fuego. La verdad es que los derechos son una conquista de nuestros trabajadores a lo largo de la historia contra las fuerzas que capturan el poder. No bajó una mano del cielo para darnos las 8 horas de trabajo o el derecho a la vida. No nacemos en nuestro ADN con el derecho a la salud

Los cambios en la distribución del poder y los derechos se ganan. Los obreros de la escuela Santa María murieron por un pliego de peticiones que incluía que las pulperías no los estafaran, que se pusiera una escuela para sus niños y que los trabajadores dejaran de morir por falta de seguridad laboral. Los trabajadores de la FOM, quemados vivos en Punta Arenas, los del Salvador, los portuarios masacrados en la plaza Echaurren en Valparaíso, los trabajadores asesinados por la dictadura de Pinochet, los trabajadores de plaza Colón en Antofagasta, al igual que esta Convención que los del rechazo resisten, tiene muertos, heridos, abusados y mutilados que dejaron su sangre para que la sociedad alcanzara un estándar CIVILIZADO de vida

Quienes se oponen usan los mismos argumentos de siempre: el apocalipsis y la mentira. Pero, cómo se desenmascaran? Con datos:

La redistribución del poder que propone el Estado Regional es una cuenta pendiente desde 1829, cuando la aristocracia santiaguina tomó sangrientamente el poder, mataron a héroes de nuestra independencia y reinstalaron el orden colonial concentrado en Santiago con Portales a la cabeza. Desmontaron el ejército de Concepción y acumularon todo el poder para unas pocas familias santiaguinas. Idea de la que no hemos podido desprendernos. 

Hoy, estamos desmontando ese régimen portaliano, que no es más que entregarle el poder a unos pocos santiaguinos, hombres y blancos, usando al ejército como policía nacional para alcanzar una supuesta ESTABILIDAD política y económica a través de la sangre y el fuego cuando es necesario. 

Ha sido una lucha permanente de los trabajadores contra las fuerzas conservadoras que tienen el orden y los privilegios concentrados y secuestrados, que anuncian el apocalipsis frente a tal o cual cambio o derecho que favorece a la mayoría pero los desfavorece a ellos

A principios del s XX, un congresista chileno, santiaguino, en este mismo edificio, acusó que una ley que se tramitaba, iba a traer el descalabro a la economía de las provincias del sur, porque la disminución violenta de la mano de obra iba a colapsar la industria, que era una medida cruel que iba a disminuir los ingresos de las familias más pobres del campo. Esa ley era la prohibición del trabajo infantil en Chile. Otro grupo se negaba a una iniciativa del gobierno que traería desempleo, colapso en la economía agrícola del Maule y Colchagua y la pérdida de nuestras tradiciones. Esa iniciativa era traer una partida grande de tractores para eficientar la producción y reemplazar la tracción animal. Siempre el apocalipsis, que nunca llega

Hoy también consagramos que los derechos son inherentes a las personas. Pero discrepo. Porque INHERENTE significa ESENCIAL, es decir que son algo propio como el calor es inherente al fuego. La verdad es que los derechos son una conquista de nuestros trabajadores a lo largo de la historia contra las fuerzas que capturan el poder. No bajó una mano del cielo para darnos las 8 horas de trabajo o el derecho a la vida. No nacemos en nuestro ADN con el derecho a la salud

Los cambios en la distribución del poder y los derechos se ganan. Los obreros de la escuela Santa María murieron por un pliego de peticiones que incluía que las pulperías no los estafaran, que se pusiera una escuela para sus niños y que los trabajadores dejaran de morir por falta de seguridad laboral. Los trabajadores de la FOM, quemados vivos en Punta Arenas, los del Salvador, los portuarios masacrados en la plaza Echaurren en Valparaíso, los trabajadores asesinados por la dictadura de Pinochet, los trabajadores de plaza Colón en Antofagasta, al igual que esta Convención que los del rechazo resisten, tiene muertos, heridos, abusados y mutilados que dejaron su sangre para que la sociedad alcanzara un estándar CIVILIZADO de vida

Quienes se oponen usan los mismos argumentos de siempre: el apocalipsis y la mentira. Pero, cómo se desenmascaran? Con datos:

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