The Cristo Centro Podcast Cristo Centro GDL

David Golden: Jesús es nuestro Sumo Sacerdote y hace posible que entremos en la presencia de Dios a través de Su misericordia y gracia. ¡Él es fiel! Cuando nos convertimos en hijos de Dios por medio de la fe, nos convertimos en hijos del Rey y obtenemos el privilegio de ser sacerdotes. Como sacerdotes, podemos llevar a otros a Dios demostrando Su misericordia y gracia.

David Golden: Vemos el corazón del ministerio de Jesús, donde priorizó a las personas sobre las estructuras físicas, encontrándolas donde estaban: en pueblos, sinagogas y hogares. A través de pasajes de Marcos, 1 Pedro y Mateo, descubrimos el poder transformador de encontrarse con Dios, que remodela nuestros pensamientos y acciones, iluminando el mundo con Su luz. No te pierdas esta discusión perspicaz sobre cómo nuestros encuentros con Dios conducen a cambios tangibles en nuestras vidas y relaciones."

David Golden: Tenemos esta tremenda promesa de Dios de que incluso las pruebas, aflicciones y dificultades pueden contribuir a traer algo bueno que Dios ha planeado para nosotros. Para que esa promesa se cumpla en nuestras vidas, debemos aprender a conformarnos al Espíritu y su propósito para nuestras vidas, y superar todos los obstáculos para obedecer la voluntad de Dios.

David Golden: Jesús oraba para que tengan un conocimiento íntimo del Padre, protección sobrenatural, gozo y lleguen a la unidad para seguir alcanzando a los perdidos después de que Él esté de vuelta en su trono.

David Golden: Transformados por el Poder de la Resurrección de Jesús… En este sermón exploraremos cómo la resurrección de Jesucristo nos brinda la oportunidad de experimentar una vida renovada. A través de su sacrificio perfecto como el Cordero de Dios que quita los pecados del mundo, podemos ser transformados por el poder de su resurrección. Descubre cómo esta verdad fundamental del cristianismo puede impactar y cambiar nuestras vidas.

David Golden: Después de que Jesús cumplió su misión y comenzó a mostrar a sus discípulos que tenían que seguir cumpliendo la misma misión de sanar a los enfermos, liberar a los cautivos y predicar las buenas nuevas del reino, les permitió escuchar su oración al Padre en un momento de angustia. Esa oración nos enseña cómo evitar caer en la tentación y el engaño de nuestros propios deseos.