Marcas de Fe Olenka Barco

Hoy aprenderemos cómo amar a nuestro "yo del pasado" aquel que, de vez en cuando, sentimos que no encaja con nuestro presente. Las versiones de uno mismo se forman día tras día, volver pasado, Uy! no es posible, sin embargo es una fuente de aprendizaje, donde adquieres sabiduría que te permitirá crecer y ser mejor en el presente.

En la vida cristiana, como ya te lo he dicho, todos los días son una lucha, de mirar a través de la biblia y sentir que es nuestro espejito para ver como vamos, estamos aprendiendo, estamos fallando, estamos siendo por Cristo, o no. Cada día, eres mejor o peor que tu versión de ayer.

Disfruta este episodio, al final, dirás gracias por mi "yo del pasado".

Y es que ¿Hay algo bueno a pesar de esta crisis? 

Al igual que cada experiencia desafiante que tenemos en nuestra vida, el coronavirus viene a enseñarnos al menos tres cosas, que tenemos el control de absolutamente nada, que somos vulnerables y que dejarnos influenciar por el miedo, es lo peor. Sin embargo, entre las lecciones aprendimos tenemos:

1.  Aprendimos a conocernos

2. Nos trajo compasión

3. Mayor unidad

4. Mayor creatividad

Recuerda: Yo les he dicho estas cosas para que en mí hallen paz. En este mundo afrontarán aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo -Juan 16:33

El mundo ha sentido el golpe de la pandemia generada por el COVID-19, existe mucha desesperación y angustia. Sin embargo, ¿Qué debemos hacer para afrontar este tiempo? Este podcast te dará 5 tips para afrontar este tiempo, puedas llegar a sentir la paz que Cristo da en medio de las turbulencias.

Tratar con personas no es nada fácil, lo cierto es que al demostrarle AMOR a nuestro prójimo estamos mostrando el AMOR de Dios y lo que ÉL ha hecho en nuestra vida . Nuestro prójimo es toda aquella personita que se encuentre dentro de nuestro entorno social, esto significa que puede ser nuestra familia, amigos, vecinos, compañeros, conocidos o cualquier otra persona que tenga contacto directo con nosotros. Veremos 5 maneras de cómo podemos amar a nuestro prójimo.

El amor nos enseña a vernos de la manera que el Señor lo hace.

Jesús portó muchas marcas en su cuerpo resucitado debido a nosotros, él llevó las marcas del azote, de las espinas, de la laza y de aquellos clavos. Todas estas marcas solo testificaban su amor por la humanidad.