Tomasa Soledad Acosta Tomasa Soledad Acosta
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- Society & Culture
Estos son relatos y conversaciones espontáneas sobre las costumbres de Juan Gordo, un pueblo como muchos en el caribe colombiano, y una Juangordera, como muchas mujeres pueblerinas que andamos regadas por el mundo.
A mi me gusta la comida, cocinar, la música, bailar, hablar paja y ponerme sentimental.
¡Vamos escuchá con sentimiento esto mija linda!
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La muerte. Primera parte.
Este episodio es una vuelta a este espacio. Una necesidad ante la ausencia del abrazo familiar en carne viva en una situación desgarradora. Pero también es un agradecimeinto inmenso a la vida por la familia extensa y su capacidad de sostenernos cuando la vaina se pone delgadita y a nosotras mismas nos faltan las fuerzas.
Este relato no tiene un orden, porque el dolor no tiene una temporalidad lineal y me atrevería a asegurar que en Juan Gordo el tiempo, tal cual como lo vemos contado por horas, no existe.
Yo soy, de nuevo, Tomasa Soledad Acosta. -
Primer otoño
Me había ido, incluso ni yo misma sabía dónde estaba. Ahora me he descubierto aquí, en este lugar que aún no tiene nombre.
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¿Será que ni los bollos nos merecemos?
Me tenía como con "el yo no sé por dónde" esta cuestión. ¡Que vaina de jodida es este ser humano! Que le ofrecen gurapo y lo recibe sin hielo, porque no cree que merezca pasá el sofoco que lo trae casi muriendo.
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Un Mochito: a $100 los guine'os
Hay cosas bellas que rompen el silencio, quién dijo que no puede ser una cosa de esas un guineo.