202. Lluís Bassat, publicista y coleccionista de arte
Lluís Bassat, el mejor publicitario español del siglo XX no nació creativo ni empresario. Con vocación de arquitecto, comenzó los estudios de derecho y ciencias económicas. Fue en un posgrado de la escuela de ingenieros relativo a la dirección de empresas donde entró en contacto con la publicidad, el marketing y la investigación de mercados, lo que le llevó a fundar su agencia de publicidad. Nuestro invitado comparte recuerdos de su infancia, los primeros juguetes: el triciclo, la pelota, el Meccano y los cromos que salían en las chocolatinas. Primeras pulsiones coleccionistas como los billetes de metro capicúa o las excursiones en busca de libros al Mercado dominical de San Antonio. Lluís Bassat nos hizo afeitarnos el bolsillo con las campañas Gila y Filomatic. Es más, nos relata el extravío de una colección de unas 250 maquinillas de afeitar. Cuando Gillette compró la empresa de cuchillas de afeitar a su familia, le solicitaron su colección de más de 250 maquinillas para exponerlas en su museo de Boston. Una colección que prestó y que jamás le devolvieron, por lo que tuvo que reiniciar desde cero. El primer acuerdo llegó en el año 75 y socios en el año 80 cuando Bassat y se convirtió en Bassat Ogilvy donde ha permanecido en la presidencia hasta el año 2007, año de su hipotética jubilación tras desempeñar cargos directivos internacionales. En la actualidad sigue creando campañas publicitarias de carácter benéfico. D. Lluís como creativo ha tenido la suerte de trabajar con los mejores y nos ilustra con buenos ejemplos como el de Pepe Rosas, un director de arte brillantísimo. Los directores de arte se inspiran normalmente en los pintores contemporáneos, el arte puro, el arte que no tiene que cumplir un objetivo como es vender un producto, sino ese arte que lo único que pretende es hacer sentir a la persona que lo está mirando, sentir la belleza, sentir la emoción, incluso sentir el rechazo, hay pinturas que son realmente fuertísimas y durísimas. De esta forma educó el ojo acudiendo a exposiciones de arte y experimentando emociones distintas. Un hábito que adquirió en la infancia dado que sus padres le llevaron a visitar muchas exposiciones y museos… Desde pintura clásica a pintura más moderna, impresionista y arte abstracto. Le apasiona el arte abstracto y contemporáneo. El primer cuadro que compró en su vida fue un cuadro completamente abstracto, en el año 1968 pagado a plazos. No te pierdas la aventura galerista desde el año 73 hasta el 80. El germen de una colección con aproximadamente de más de 350 cuadros escogidos uno a uno junto a su esposa Carmen. D. Lluís nos comenta que todo lo que ha ganado en su vida “lo tiene colgado en las paredes”. Cuando ve un cuadro que le gusta, sonríe porque el artista ha transmitido algo, un amor y pasión especial. “Si te pones delante de un cuadro y simplemente te gusta, ya ha cumplido su función, el arte es una reacción por parte del espectador”. La mayoría de los artistas de su colección ya no son solo artistas, son amigos por los que siente auténtico cariño: Joan Miró, Tàpies o Guinovart a quien introdujo en la galería Martha Jackson. Un hilo emocional, no físico. La colección del matrimonio Bassat está formada por piezas “que nos han robado el corazón cuando las hemos visto”. Arte del nuevo realismo, surrealismo, cubismo, expresionismo alemán, pintura abstracta o informalismo. Por lo tanto, no se puede decir que tenga un hilo conductor de un determinado movimiento artístico. Es solamente el gusto de Carmen y Lluís Bassat, una colección a cuatro manos. La Colección de Arte Bassat está ubicada en el primer edificio que hizo Gaudí en su vida y que se encuentra en Mataró. Pero también hay parte de la colección que va rotando con exposiciones diferentes. Ahora dos en Polonia, dos en Bulgaria, una en Nueva York y luego por España en Ávila, Valladolid, Sevilla, Córdoba, Huelva, Cádiz, prácticamente en toda Andalucía, y muchísimas ciudades más. Para estas 54 exposiciones salen muchos cuadros que hay en su casa. Lo importante es hacer algo por los demás en la vida, no solo en nuestra fundación. Agradecidos por haber disfrutado de una vida plena, la familia Bassat es consciente de que hay mucha gente que no la tiene. A través de la Fundación Carmen y Lluís Bassat ayudan a las personas más necesitadas. Nuestro invitado, además de apasionado por el arte, se declara coleccionista de todo: cajas, libros, discos. D. Lluís comparte sabias reflexiones y próximos proyectos en un episodio extraordinario del podcast de todocoleccion con interesantes anécdotas y vivencias de un ser humano excepcional. Quedamos atentos a tus me gusta, opiniones, comentarios y propuestas para entrevistar a nuevos protagonistas que, como tú, nos ayudan a divulgar la cultura del coleccionismo. Esperamos tus noticias en el email comunicacion@todocoleccion.net.