Hola, Nico. Hola, Aurora. Como ya os habréis dado cuenta, vuestro padre no para de inventar. Que si una newsletter, un podcast, ahora subiendo vídeos a Youtube. Estaremos de acuerdo en que, al menos, no os estáis aburriendo con Papá. Con esto de haber subido el primer capítulo de mi camino hacia el Hyrox PRO a Youtube han vuelto ciertos pensamientos que hacía muuuuucho que no sentía. Esa voz insoportable y repetitiva que te dice una y otra vez al oído “¿Qué haces?” “No te expongas”, “Quédate tranquilito con tus cosas”. Es la razón número uno por la que no intentamos más cosas nuevas: nuestro cerebro nos sabotea porque necesita certidumbre. Necesita saber que nos vamos a levantar, vamos a seguir la rutina de siempre, vamos a hacer todo lo que se espera de nosotros y nos vamos a ir a la cama sin habernos salido del camino pre establecido ni un solo milímetro. Y es que el ver a alguien que conocemos hacer cosas distintas nos resulta incómodo. Al cerebro le gusta organizar todo lo que conoce en distintos cajones y, si de pronto, algo que estaba en un lugar se sale y se cambia de sitio, lo incomoda. Eso es lo que pasa cuando ven a alguien que comienza a hacer algo nuevo. Subir vídeos a Youtube, empezar una nueva carrera profesional, exponer pinturas de acuarelas o hacerse runner. Se sienten incómodos porque lo que hacen no corresponde con lo que esperaban de ellos. Y la manera de hacer que esa incomodidad se vaya debería ser la de aceptar el cambio o los nuevos caminos en el prójimo, pero la solución que se escoge, tristemente, es la de intentar que la oveja vuelva al redil del que nunca debería haber salido. “Vaya, ahora eres deportista” “Deja de hacer el carajote subiendo vídeos” “Si a ti lo que te gusta es comer, vaya la que te ha dado con la comida sana”. Y muchas veces funciona. La presión social y la de nuestra voz en el hombro ganan la batalla y volvemos con las orejas agachadas a hacer las cosas que se esperan de nosotros. Hijos, os aconsejo que no les dejéis ganar la batalla. Espero que mi ejemplo, poniéndome en el foco de distintas maneras, os sirva de inspiración (y a ti que me lees) para intentar constantemente probar nuevos caminos, salir del establecido y mutear todo comentario ajeno a vosotros. Quizás, y solo quizás, si un día conseguís algo reseñable, algo admirable para los que os rodean, os aseguro que llegarán los halagos y los “lo sabía” de los mismos que ahora intentan que vuelvas al lugar del que nunca debiste salir. Primero siempre resuenan los comentarios y luego viene la admiración. Nunca es al revés. Os quiero hijos. ¿HAS INTENTADO ALGO NUEVO EN LO QUE VA DE AÑO? PD Me falta tener un programa de radio. Si eres Papá y has llegado aquí de rebote, quédate, te interesa. This is a public episode. If you would like to discuss this with other subscribers or get access to bonus episodes, visit porsipapanoesta.substack.com