Berlinas deportivas, coches en peligro de extinción
Seguimos con nuestra serie de “Especies en vías de extinción” y vamos a recordar a las berlinas deportivas, que fueron un referente de automóviles que aunaban lujo, confort, habitabilidad, capacidad de representación, buenas prestaciones y diversión al volante… algunas, os lo aseguro, inolvidables… La verdad es que resulta bastante obvio porque el concepto de “berlina deportiva” tiene dos palabras. Primero, berlina. Todos entendemos por berlina un coche de 3 volúmenes y 4 puertas laterales más portón. La otra palabra es “deportiva” y entiendo que ese significado no incluye simplemente unas prestaciones de alto nivel, sino un comportamiento deportivo razonablemente ágil y, sobre todo, divertido. Pero hay algo que no está incluido en el nombre, pero que para mí es seña de identidad de estas berlinas: Su elegancia, relativa discreción y capacidad de representación. Una berlina muy potente, de excelente comportamiento deportivo, pero erizada de alerones, aletines y muy llamativas, para mí no encajan en la definición más precisa y exigente de “berlina deportiva”. 1. Audi RS6 V10. El nombre competo de esta joya aparecida en 2008 es Audi RS 5.0 TFSI V10 Quattro Tiptronic… En su momento su precio se acercaba a los 150.000 €. El coche era tan “bestia” que, en las generaciones siguientes, en vez de aumentar la potencia que suele ser habitual, en este caso se bajó en busca de civilizar este coche. Incluso se “perdieron” dos cilindros por el camino. 2. BMW M5. Sí, podría haber elegido un M5 más moderno, pero es que este M5 E28 aparecido en 1984 y ofrecido hasta 1987 es una de las primeras berlinas deportivas de altas prestaciones. Recordad que primero apareció el BMW 535i M con 218 CV y luego el “verdadero” y primer M5, éste, con motor 6 cilindros en línea 3,5 litros y 285 CV… ambos los pude probar en su momento… y alucine. 3. Ford Sierra Cosworth. Evidentemente la segunda versión, con propulsión posterior y carrocería tres volúmenes o la tercera, con tracción total pero la misma carrocería de tres volúmenes, en ambos casos con solo un discreto alerón posterior, nada que ver son los excesos de la primera. Para mí la mejor es la de en medio, la de 1986, salvo si vas a hacer rallyes o ir a la nieve. Es más práctica que la primera, más ligera que la tercera y su cambio Getrag, casi de carreras, era una auténtica delicia. 4. Jaguar XJR. Es innecesario decir que Jaguar tenía, y a pesar de todo sigue teniendo, una imagen de coche de lujo con cierta clase y estilo. Y también tenían berlinas más que deportiva, muy “vitaminadas” gracias a sus motores de 12 cilindros. Pero en 1994 decidieron dar un paso más y hacer una verdadera berlina deportiva, no una simple berlina rápida. 5. Lancia Thema 8.32. El Thema 8.32 llamado por todos “Thema Ferrari” muchos le definieron como el “Ferrari de cuatro puertas” … quienes así lo definieron estaba claro que nunca, ¡jamás!, se habían montado en un Ferrari. Porque si pudiese me compraría un Ferrari, pero pocos coches hay más incomodos que un Ferrari, ahora, pero en 1984, cuando apareció este coche, todavía más 6. Lotus Omega. Muchos se olvidan de esta genuina berlina deportiva aparecida en 1990. Y es que, en la Europa continental, la verdad, se vio poco. A partir de una buena base, como era el Opel Omega, Lotus diseñó un modelo que se convirtió en una pesadilla para coches como el BMW M5. 7. Mercedes-Benz 500 E. Voy a ser honesto… no sé si este modelo de 1990 debería estar aquí porque quizás le falta algo de deportividad… ¡ojo! digo deportividad refiriéndome sobre todo a su cambio automático, no a su potencia. Con su motor 5.0 V8 de 326 CV el Mercedes 500 E era el modelo ideal para viajar rápido y cómodo por las autopistas alemanas libres de limitaciones. 8. MG ZT 260. Este coche, muchas veces olvidado, llega en 2003. La marca estaba en horas bajas y su gama resultaba un p