En el primer episodio sobre los apóstoles de Linneo vimos que Christoffer Tärnström, perdió la vida en su viaje a China, donde, entre otras cosas, pretendía conseguir una planta del té. Linneo tenía mucho interés en esa planta, por entonces solo conocida en Europa por sus hojas. Y no solo Linneo. Muchos estados europeos estaban interesados en romper el monopolio de China y Japón, los únicos países donde se cultivaba el té. Tras el fracaso de su primer apóstol, en 1748, Linneo envió no uno, sino dos apóstoles a Cantón: Olof Torén, Carl Fredrik Adler y Pehr Osbeck. No tuvieron éxito, así que Linneo no llegó a hacerse con una planta completa en su vida. Aunque eso no le impidió darle un nombre científico. En 1753, basándose en la descripción dada por alemán Engelbert Kaempfer, la bautizó con el nombre de Thea sinensis. El nombre quedó oficialmente fijado como Camellia sinensis en 1888 con una nueva descripción debida al naturalista alemán Carl Ernst Otto Kuntze.
Informações
- Podcast
- Publicado4 de outubro de 2017 10:38 UTC
- ClassificaçãoLivre