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Trebolarium. Capítulo 1. Mindhunter o como hacer las preguntas perfectas Trebolarium

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Capítulo 1. MindHaunter o cómo hacer las preguntas perfectas.

¡Hola! Soy Ana Isabel López Siles, fundadora de Trebolarium. Soy escritora, editora y una flipada del cine y de eso es de lo que vamos a hablar en este canal: cine, autopublicación y superación personal y si no te gusta ninguno de estos temas… ¿po pa qué me escuchas?

Y sí… como si fuera una primeriza, empiezo con un micrófono de mierda. Es lo que tiene haber roto el micrófono bueno.

Total, que este es el primer capítulo. Me encanta el podcasting y hace mucho que no lo hago y quiero retomarlo y voy a empezar por una de las series más flipantes de Netflix, Mindhaunter, ese peaso de chacho de serie.

Te pongo en antecedentes.

Hay un tío del FBI que empieza a cuestionarse cosas sobre cómo delinquen los malotes y un día da con un colega que medio lo entiende. Entonces deciden entrevistar, con ayuda de una profesora de sociología, a presos por todas las cárceles para recoger datos con los que perfilar a los delincuentes. Entonces nace una de las unidades más alucinantes del FBI que hoy por hoy es imprescindible para evitar, ¡ojo! evitar, futuros crímenes. La serie no dice estar basada en hechos reales pero sí que recoge un montón de hechos reales ya que se relatan en un libro que se titula “Asesinos en serie” que está escrito por Robert K. Resler y cuyo enlace, si no se me olvida, os lo dejo en las notas de este audio.

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NO obstante, la serie no está basada en ese libro sino en este otro: Mindhunter: Cazador de mentes
escrito por Jhon Douglas y Mark Olshaker.

Por cierto, no necesitarás mucho tiempo para descubrir que mi inglés es mu patatero y a veces mi español.

Douglas fue el que, junto a Reser, entrevistaron a los criminales de las cárceles y empezaron a apoyarse en esas entrevistas para realizar los primeros perfil y fueron los que acuñaron el término “asesinos en serie”


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Visto desde el punto de vista narrativo, uno de los personajes principales es una obra de arte y deberíamos fijarnos en él. Es Holden For, un agente del FBI curioso, tocapelotas, terco y, cuando se le empieza a hacer caso evoluciona y se vuelve engreído y atrevido, lo que le pone en situaciones de cierto peligro. Es un personaje redondo y es una de las cosas que hace que la serie sea apasionante además de por muchas cosas más, por supuesto como por ejemplo, la recreación del espíritu universitario de los años 70 (a mí me recordó cuando estudiaba políticas) donde explotan las ciencias sociales o los excelentes diálogos cuando interrogan a los presos.

¿y qué diferencia hay entre un personaje plano y un personaje redondo?

Pues el plano es un personaje que tiene un rol y de ahí no sale. El personaje redondo se caracteriza por tres cuestiones:

1 qué está lleno de matices. Ni es blanco ni es negro sino de una escala de grises desconcertante y a veces es más blanco que el pañal de un recién nacido y a veces es más oscuro que una cueva de murciélagos vampiros.

2. Que evoluciona o involuciona, crece o se pervierte, se empodera o desarrolla una gran mezquindad que lo hace jodidamente apasionante. Ni más ni menos.

El tercero y no menos importante es que interactúa y es el contraste con el resto de personajes, especialmente con el antagonista que debe ser un personaje todavía más trabajado y poderoso para que el héroe lo tenga dificilito si es que queremos hacer una buena historia.

Por cierto, que sepas, que tengo un curso dentro de mi membresía sobre cómo hacer personajes en tres dimensiones.

Enlace: https://lanzamiento.trebolarium.com/personajes-3d/


Y ahora vamos a hablar del asunto de la superación personal de esta serie que también es muy potente y se trata del poder de las preguntas.

¿Sabes por qué nació la unidad de criminología del FBI?

Pues por una razón muy sencilla… por las preguntas. Porque el agente tocapelotas empezó a hacer preguntas

Capítulo 1. MindHaunter o cómo hacer las preguntas perfectas.

¡Hola! Soy Ana Isabel López Siles, fundadora de Trebolarium. Soy escritora, editora y una flipada del cine y de eso es de lo que vamos a hablar en este canal: cine, autopublicación y superación personal y si no te gusta ninguno de estos temas… ¿po pa qué me escuchas?

Y sí… como si fuera una primeriza, empiezo con un micrófono de mierda. Es lo que tiene haber roto el micrófono bueno.

Total, que este es el primer capítulo. Me encanta el podcasting y hace mucho que no lo hago y quiero retomarlo y voy a empezar por una de las series más flipantes de Netflix, Mindhaunter, ese peaso de chacho de serie.

Te pongo en antecedentes.

Hay un tío del FBI que empieza a cuestionarse cosas sobre cómo delinquen los malotes y un día da con un colega que medio lo entiende. Entonces deciden entrevistar, con ayuda de una profesora de sociología, a presos por todas las cárceles para recoger datos con los que perfilar a los delincuentes. Entonces nace una de las unidades más alucinantes del FBI que hoy por hoy es imprescindible para evitar, ¡ojo! evitar, futuros crímenes. La serie no dice estar basada en hechos reales pero sí que recoge un montón de hechos reales ya que se relatan en un libro que se titula “Asesinos en serie” que está escrito por Robert K. Resler y cuyo enlace, si no se me olvida, os lo dejo en las notas de este audio.

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NO obstante, la serie no está basada en ese libro sino en este otro: Mindhunter: Cazador de mentes
escrito por Jhon Douglas y Mark Olshaker.

Por cierto, no necesitarás mucho tiempo para descubrir que mi inglés es mu patatero y a veces mi español.

Douglas fue el que, junto a Reser, entrevistaron a los criminales de las cárceles y empezaron a apoyarse en esas entrevistas para realizar los primeros perfil y fueron los que acuñaron el término “asesinos en serie”


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Visto desde el punto de vista narrativo, uno de los personajes principales es una obra de arte y deberíamos fijarnos en él. Es Holden For, un agente del FBI curioso, tocapelotas, terco y, cuando se le empieza a hacer caso evoluciona y se vuelve engreído y atrevido, lo que le pone en situaciones de cierto peligro. Es un personaje redondo y es una de las cosas que hace que la serie sea apasionante además de por muchas cosas más, por supuesto como por ejemplo, la recreación del espíritu universitario de los años 70 (a mí me recordó cuando estudiaba políticas) donde explotan las ciencias sociales o los excelentes diálogos cuando interrogan a los presos.

¿y qué diferencia hay entre un personaje plano y un personaje redondo?

Pues el plano es un personaje que tiene un rol y de ahí no sale. El personaje redondo se caracteriza por tres cuestiones:

1 qué está lleno de matices. Ni es blanco ni es negro sino de una escala de grises desconcertante y a veces es más blanco que el pañal de un recién nacido y a veces es más oscuro que una cueva de murciélagos vampiros.

2. Que evoluciona o involuciona, crece o se pervierte, se empodera o desarrolla una gran mezquindad que lo hace jodidamente apasionante. Ni más ni menos.

El tercero y no menos importante es que interactúa y es el contraste con el resto de personajes, especialmente con el antagonista que debe ser un personaje todavía más trabajado y poderoso para que el héroe lo tenga dificilito si es que queremos hacer una buena historia.

Por cierto, que sepas, que tengo un curso dentro de mi membresía sobre cómo hacer personajes en tres dimensiones.

Enlace: https://lanzamiento.trebolarium.com/personajes-3d/


Y ahora vamos a hablar del asunto de la superación personal de esta serie que también es muy potente y se trata del poder de las preguntas.

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Pues por una razón muy sencilla… por las preguntas. Porque el agente tocapelotas empezó a hacer preguntas

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